¿TE HA PASADO QUE ALGUNO DE TUS DEDOS SE QUEDA "ATORADO"?
La tenosinovitis estenosante, comúnmente conocida como "dedo en gatillo", afecta los tendones y poleas de la mano que flexionan los dedos. Se ha señalado una prevalencia de 1 a 2.2 % en personas sanas mayores de 30 años y de 11 % en pacientes diabéticos.
Existen múltiples teorías respecto al origen de la tenosinovitis. El atrapamiento puede estar asociado a movimientos repetitivos, prolongados e inusuales del tendón flexor.
Los tendones trabajan como cuerdas largas que conectan los músculos con los huesos de los dedos y el pulgar. En el dedo, las poleas son una serie de anillos que forman un túnel a través del cual deben deslizarse los tendones.El dedo o pulgar en gatillo ocurre cuando la polea que está en la base del dedo se vuelve más gruesa y comprime al tendón, haciendo que a este le resulte difícil moverse con libertad a través de la polea. Cuando el tendón queda trabado, produce inflamación.
Los síntomas pueden incluir:
Aumento de volumen en la palma de su mano o base de los dedos que puede ser doloroso.
Inflamación.
Sensación de paralización o presión en las articulaciones del dedo.
Dolor cuando flexiona o extiende su dedo.
La rigidez y la inmovilización tienden a empeorar después de la inactividad, por ejemplo cuando se despierta en la mañana, a veces, se puede tener sensación de dislocación en la articulación del dedo. En casos severos de dedo en gatillo, el dedo no puede extenderse, ni siquiera con ayuda. A veces, uno o más dedos están afectados.
Existen múltiples modalidades terapéuticas que van desde el manejo conservador como la rehabilitación (terapia física y ocupacional, infiltración local de medicamentos como esteroides, uso de férulas), hasta la liberación quirúrgica de la polea A1 que es la más comúnmente afectada.