SOBRE LOS ESGUINCES
¿Qué es un esguince?
Es el resultado de un sobreestiramiento violento de uno o más ligamentos, estructuras que rodean una articulación. Se requiere una fuerza brusca aplicada a una articulación, para provocar que la articulación sobrepase su grado de amplitud normal y se lesione.
Los mecanismos que se atribuyen para ocasionar la lesión pueden ser por el uso excesivo o tensión constante sobre el ligamento; o bien a consecuencia de un traumatismo directo o indirecto. Un mecanismo por inversión ocurre cuando el pie gira hacia dentro desde una posición en flexión plantar,es el más frecuente. Por eversión sucede al pisar un hoyo, el pie se evierte y abduce o abre la pierna apoyada en rotación externa.
¿Quiénes están expuestos a sufrir estas lesiones?
Especialmente los corredores, marchistas, deportes de salto, carrera o contacto, y en personas que muestran debilidad muscular, poca condición física y deportistas con lesiones previas. Otros tejidos que se lesionan cuando se produce un sobreestiramiento son aquellos que rodean el ligamento afectado como son vasos sanguíneos, tendones, huesos, periostio y tejido muscular.
Puesto que el esguince se produce en estructuras blandas, la cicatrización ocurre con tejido fibroso, y con ello se incrementa la longitud del ligamento pero disminuye su fuerza, entonces es propenso a volverse a lesionar. El tiempo que tarda en cicatrizar es de 3 a 4 semanas de acuerdo al grado de afectación.
Se ha clasificado en grados de acuerdo a la severidad de la lesión: el grado I o leve corresponde al desgarre de algunas fibras del ligamento, y no existe pérdida de la función. En el grado II o moderado se observa rotura de una porción del ligamento y cierta pérdida de la función. Y en el grado III o grave existe rotura completa del ligamento o separación de éste del hueso, y pérdida completa de la función.
Es importante considerar que puede convertirse en un esguince crónico cuando ocurre la cicatrización del ligamento lesionado pero con adherencia al hueso, entonces se observa tumefacción o inflamación de la articulación, dolor posterior a la deambulación prolongada o de actividades intensas;hay dolor y limitación a la movilidad.
Por otro lado, el tratamiento que se ofrece dependerá de una correcta evaluación clínica, en caso necesario recurrir a estudios de gabinete para determinar el tratamiento oportuno y evitar la cronicidad de la lesión. También es indispensable una adecuada rehabilitación que permita la máxima funcionalidad a través de ejercicios bien indicados de manera individualizada.
Puede ocurrir un esguince recidivante que se identifica por dolor intenso al momento de la lesión; sensación de desgarro interno, tumefacción en el sitio de lesión, edema de pie, sensación de quemadura inmediatamente después de la lesión.
¿Cómo se pueden prevenir los esguinces?
A través de programas de fortalecimiento específicos, de acuerdo al deporte que se practica; ejercicios de calentamiento adecuados antes de la actividad deportiva; vendaje en áreas vulnerables antes de competencias; uso de equipo apropiado de protección como zapatos con buen soporte.
Como se ha mencionado es fundamental la valoración de médico de primer contacto, y en caso necesario ortopedista y de médico rehabilitador quien indicará la necesidad de crioterapia, TENS, ultrasonido de acuerdo a la evaluación realizada.
Guerra, L. (2004). Patología musculoesquelética. En Guerra, L. (Ed.). Manual de Fisioterapia (209-211). México: El Manual Moderno.